Bienvenidos

Lector apacible y bucólico, sobrio e inocente hombre de bien, arroja este libro saturniano, orgiástico y melacólico. Sino has estudiado tu retórica con Satán, el astuto decano, ¡arrójalo!. no comprenderás nada de él o me creeras histérico. Pero si, sin dejarte hechizar, tu pupila sabe sumergirse en los abismos, léeme para aprender a amarme; alma curiosa que sufres y andas en busca de tu paraíso ¡compadéceme! sino ¡yo te maldigo!

-Charles Baudelaire-

domingo, 9 de diciembre de 2007

lo que permanece oculto

Photo Sharing and Video Hosting at Photobucket

Permanecemos en silencio mirando alrededor,
sujetándonos de la mano, jugando con los pulgares.
mientras el cálido humo de los cigarrillos nos envuelve
y nos quedamos así, fingiendo que el tiempo no pasa.
Pero ¿cómo decirte lo que quiero?
nunca las palabras han servido
para describir los sentimientos;
no son precisas, evitan decir lo suficiente.
Prefiero hablar en silencio,
no dirá éste algo de más
y, sino es suficiente, esconderé palabras
bajo preguntas sencillas como ¿qué has hecho?
Pretendiendo que soy fuerte
nunca diré simplemente “te quiero”
eso viene cobijado con los cálidos besos,
donde trato de morderte al jugar con tus labios.
No esperes que hable directo, no trates de cambiarme,
acepta palabras ambiguas, frases sin sentido,
versos que no llegan a nada
pero tratan de decirte demasiado.

No hay comentarios: